Las fiestas de verano de Cinco Olivas conquistaron por su música y sus concursos. Los cincolivanos pudieron disfrutar de las actividades programadas del 4 al 6 de agosto.

El programa de actos comenzó con el lanzamiento del característico "güete", con el que comenzó un día dedicado al deporte, con un campeonato de street-fútbol, y los niños, que disfrutaron con el concurso de dibujo infantil, en el que hubo más de 20 participantes y el lanzamiento de bombas japonesas en el campo de fútbol. Por la noche se optó por una programación diferente a la de otros años, con una batukada incluida dentro de la programación del ocio nocturno del Servicio de Juventud y un concierto del grupo quintano 'Sin Estética'. Ambas actividades resultaron un éxito.

Al día siguiente, los pescadores y los aficionados de este deporte se citaron muy temprano. El club de pesca 'Meandros del Ebro' organizó el concurso, que cada año consigue más participantes y capturas de gran tamaño. El almuerzo de después, patrocinado por el bar La Zaida, sirvió para recuperar fuerzas y la sesión de acuagym en las piscinas completó una mañana de lo más deportiva. 

La tarde del sábado estuvo dedicada a los concursos tradicionales: guiñote, parchís y rabino. También hubo tiempo para los talleres infantiles organizados por la Asociación Cabaret Ribereño. A última hora de la tarde, llegó el momento de llenar el estómago con la exitosa degustación de sidra y chistorra de la sidrería Begiris.

Ya por la noche, una sesión de discomóvil, el típico toro de fuego y el sorteo del jamón volvieron a poner la diversión al máximo.

El domingo, 6 de agosto, empezó con actos dirigidos a los más pequeños de la localidad. En concreto con un parque acuático de hinchables que se instaló en las piscinas municipales y que hizo las delicias de los más pequeños. Por la tarde, los mayores también se animaron a empaparse de agua en el tradicional remojón.

Por la noche, el cine de verano cerró tres días muy disfrutados por vecinos y visitantes.

El último acto fue la traca final de fiestas que puso el broche final a la programación, después de la medianoche.