La Asociación de Amigos de Rueda celebra su día grande
El pasado sábado, 24 de agosto, el Monasterio de Rueda se vistió de largo para celebrar, una vez más, el día de su patrón. La Asociación de Amigos del Monasterio de Rueda preparó un día con distintos actos y con el objetivo de animar a la gente a que se acercara en una fecha tan señalada a visitar un monasterio que pertenece un poco a cada habitante de la comarca.
Y sus socios respondieron de forma masiva, animados también por la reciente apertura de la hospedería y por la importante inversión económica realizada por el Gobierno de Aragón en Rueda en los últimos tiempos. Una inversión que, tras la deficiente gestión y la desidia posterior, ha servido para devolverle el brillo a Rueda y para abrir una nueva etapa de ilusión y nuevos proyectos.
Después de la recepción de autoridades, que contó con la presencia de distintos alcaldes y concejales de la comarca, en representación de los 10 municipios ribereños, se inauguró una exposición de la ilustradora sastaguina Vera Galindo y otra exposición fotográfica que retrata el pasado y el presente del Monasterio. Tras esto, se celebró una misa aragonesa cantada por el coro de Sástago y presidida por el Abad del Monasterio de Poblet.
Tras la Eucaristía, tuvo lugar la Asamblea General de la asociación en la que se presentó el estado de las cuentas. Además, el presidente de la asociación, José Manuel Navarro, manifestó el interés de la junta directiva por seguir realizando todas las actividades posibles y por reivindicar la máxima implicación económica de todas las instituciones. El arquitecto de Rueda y socio de la asociación, Javier Ibargüen, se mostró optimista con la inversión que se ha realizado recientemente en el Monasterio y con el nuevo modelo, que separa la gestión de la hospedería, de las visitas guiadas y el mantenimiento del conjunto, y subrayó que ha llegado el momento de reivindicar que se continúe con el proyecto de restauración que quedó paralizado en 2007 cuando llegó la crisis.
Después, llegó el turno de la comida en la hospedería, a la que asistieron todos los socios que lo desearon y varias personas de diferente índole que fueron invitadas por cortesía de la asociación.
También, la junta directiva quiso agradecer públicamente la colaboración de administraciones, empresas y personas que están implicadas con la asociación y que hacen posible la publicación de la revista anual, seña de identidad de la asociación y que año tras año sigue saliendo adelante. Asimismo, Miguel Caballú Albiac fue nombrado socio de honor de este año.
Para acabar la tarde, los asistentes pudieron disfrutar de un fabuloso concierto a cargo de la compañía aragonesa Ad Libitum. Un espectáculo basado en las raíces musicales que unen la jota y el flamenco que contó con la extraordinaria interpretación de Vanesa Osete y un acompañamiento de lujo formado por músicos y bailarines flamencos y aragoneses.
Sin duda, el broche ideal para poner fin a una jornada preparada con mucho trabajo y mucha ilusión por la junta de la Asociación de Amigos del Monasterio.