El pasado 24 de septiembre se celebró por séptimo año consecutivo la Subida al Poyo en Alforque. Las expectativas no fallaron y más de 250 corredores se dieron cita en esta prueba de BTT que, año tras año, se va afianzando en el calendario ciclista.

Los dorsales comenzaron a repartirse a las 8 de la mañana y la salida se produjo a las 9 de la mañana. 

La prueba, que acoge en la localidad de Alforque a participantes de todo Aragón, contó este año con el corte de cinta de Sergio González, amigo de la localidad, que, año tras año, ejerce de speaker y anima toda la jornada.

La salida consta de dos recorridos, uno de 40 y otro de 60 kilómetros. En ambos, los ciclistas pedalearon juntos hasta el primer avituallamiento, que estaba situado en la localidad de Alborge. Allí, voluntarios alforquinos y alborginos ofrecieron a los deportistas un tentempié para recobrar fuerzas. El segundo avituallamiento estuvo situado en la Virgen de Montler.

El primer corredor masculino del recorrido corto en pasar por línea de meta fue Pedro Hidalgo y del recorrido largo Javier Amo. En la página web www.subidaalpoyo.com se pueden descargar ya los tiempos e informarse de todo lo relacionado con esta salida BTT que cada año atrae a más aficionados y que se vive como una auténtica fiesta.

En la meta esperaron a los ciclistas vecinos de Alforque y del resto de pueblos de la comarca, acompañantes y familiares de los participantes que no quisieron perderse esta VII edición de la Subida al Poyo.

Para hacer tiempo, se pudieron degustar tortillas de patata que los vecinos de la localidad habían preparado para agasajar a los ciclistas, jamón, chorizo a la sidra, migas y butifarra; otros voluntarios se ocuparon de los serpentines de cerveza y los refrescos. Mientras tanto, una paella gigante se estaba cocinando en el pabellón para más de 350 personas.

Como cada año, a cambio de los dorsales, la asociación cincopuntocien, organizadora del evento, regaló una bonita camiseta conmemorativa de la prueba. Los ciclistas tuvieron a su disposición las duchas y la piscina municipal, donde pudieron refrescarse y asearse.

La asociación cincopuntocien no puede dejar pasar la ocasión para hacer público su enorme agradecimiento por toda la colaboración desinteresada a vecinos y amigos que, año tras año, se vuelcan con la prueba, a todas las empresas patrocinadoras, al ayuntamiento de la localidad y a la Comarca Ribera Baja del Ebro.

Con energías renovadas, la organización ya está pensando en la VIII edición. La alegría de este día, el deporte, el compañerismo, la ayuda desinteresada, la convivencia y la fiesta son los ingredientes que alimentan el deseo de seguir trabajando para conseguir que la prueba pueda celebrarse cada año con más éxito.

Salida nocturna

Tal fue la animación en Alforque durante el fin de semana que, ya el sábado por la noche, víspera de la prueba, más de 50 corredores, entre ellos muchos niños, se animaron a realizar una salida BTT nocturna por varios municipios de la zona. Después, todo el pueblo cenó en el Centro Polivalente.

Autora fotografías: Ana Giménez